Si buscas hosting web, dominios web, correos empresariales o crear páginas web gratis, ingresa a PaginaMX
Por otro lado, si buscas crear códigos qr online ingresa al Creador de Códigos QR más potente que existe


    Actualmente la enseñanza de segundas lenguas esta basada en propuestas metodológicas que han mejorando a través de la historia, logrando una mejor enseñanza y un adecuado aprendizaje.  Los alumnos de la escuela primaria Sabas Valladares requieren metodologías basadas en lo concreto para los grados inferiores como el método directo y audio lingual, para los grados superiores se hace notar la necesidad de metodologías en que los alumnos aprendan a través de la experiencia como el método situacional y el enfoque comunicativo. Nuestro proyecto propone una metodología metacognitiva con la que los estudiantes serán más estratégicos al aprender los nuevos contenidos. Serán capaces de planear, supervisar y evaluar su propio proceso, logrando reflexionar y ser consiente del mismo. A continuación se describen los métodos que han sido parte fundamental en la enseñanza de segundas lenguas y en los que se fundamenta nuestro proyecto:
 
El método de gramática-traducción
El método directo
El método de enseñanza en situaciones
El método audio lingue
El enfoque comunicativo
Los métodos humanísticos

   EL METODO DE GRAMATICA-TRADUCCION

   También conocido como tradicional, este método nace a finales del siglo XVIII. Este método alcanzo su máxima aceptación en las escuelas durante la primera mitad del siglo XIX, “A partir de 1850, comienza a ponerse en entre dicho, aunque en realidad muchas formas y principios del Método tradicional han llegado hasta nuestros días y están presentes en aulas de idiomas de todo el mundo[1]”. A pesar de las innumerables criticas recibidas desde el Movimiento de reforma, fue considerado coma la causa de todos los males en la enseñanza-aprendizaje por su carencia de una bibliografía en lingüística, psicológica o metodología en que apoyarse.

   Este es el más viejo y ortodoxo de los métodos de enseñanza de lenguas y debe su origen a las escuelas de latín donde fue ampliamente usado para enseñar las lenguas "clásicas" (Latín y Griego) aunque más tarde se utilizó también para enseñar algunas lenguas modernas (Francés, Alemán e Inglés).

   En él se le presta atención a la asimilación de reglas gramaticales, para ello se auxiliaba de la presentación de una regla, el estudio de una lista de vocabulario y la ejecución de ejercicios de traducción. La traducción de una lengua a la otra servía como técnica principal para explicar las nuevas palabras, las formas y estructuras  gramaticales, y como vía óptima de llegar al dominio de la lengua en general.

   Para los seguidores de este método la mejor vía para decir una oración en la lengua extranjera (LE) era: comenzar una oración en la lengua materna (LM), analizar sus componentes gramaticales y luego encontrar sus equivalentes en la LE. Dicho análisis se hacía en términos de la gramática de la (LM) a partir del principio erróneo de que los patrones gramaticales son universales y pueden, por tanto, pasar de una lengua a la otra[2].
   Las explicaciones se hacían en lengua materna desaprovechándose la oportunidad de desarrollar hábitos auditivos y orales y de estimular el pensamiento en la lengua extranjera; no obstante, aquí se exigía tremendamente de la memoria pues había que recitar todos los patrones estructurales y aprender cientos de miles de palabras así como oraciones no naturales y descontextualizadas con el propósito de entrenar y desarrollar habilidades.

EL METODO DIRECTO

   El método directo (muy popular al final del siglo XIX y principios del XX) surge como una reacción al hijo menor de los métodos prácticos; dentro de los que se destacan: el método natural; el psicológico; el fonético; y el de lectura.

Es innegable que el acelerado crecimiento industrial, la internacionalización del comercio y la expansión colonial constituyeron pre-requisitos de su surgimiento. Se le llama método directo porque trata de establecer una conexión directa entre la palabra extranjera y la realidad a la que esta denomina; en otras palabras, asociar las formas del habla con las acciones, objetos, gestos y situaciones, sin la ayuda de la lengua materna (LM). Aquí el profesor repite una palabra apuntando al objeto que esta denota y lo hace tantas veces como sea necesario hasta que el estudiante la pueda reproducir.

   Este método centró su atención en el desarrollo de las 4 habilidades, comenzando por las orales, donde la expresión oral se convierte en la habilidad básica. Se ignora la existencia de la (LM), asumiendo que el aprendizaje de la (LE) y la (LM) constituyen procesos similares, solo que comenzados en diferentes edades.

   Se elimina la traducción como procedimiento de enseñanza, otro tanto así le pasa a la lectura; estimula la enseñanza inductiva de la gramática y el uso de los medios visuales, ejercicios orales y escritos. Se evitan los errores a toda costa, asumiendo que un error genera un hábito incorrecto. Existen criterios de que este método estimuló la curiosidad de los aprendices por aprender y progresar. También “se dice que con él se puede aprender en 200 horas[3]”.

   Sobre este método se dice que la pedagogía, la lingüística y la psicología perceptiva, jugaron en él un papel singular y que el mismo dio origen a múltiples variantes. Pero que fue entre las dos guerras mundiales que se revivieron sus principales principios y se llevaron a cabo estudios de experimentación con los nuevos descubrimientos de la lingüística y de la psicología

    Entonces se puede hablar de la influencia del conductismo ortodoxo y otras psicologías que ayudaron a esclarecer que el aprendizaje de lenguas es una actividad psicológica más que lógica donde existe la necesidad de despertarle y sostener el interés de los estudiantes. Hablamos de conductismo ortodoxo y la presencia de la estimulación como vía para provocar una reacción verbal en los aprendices y el cuidado en no formar hábitos.

   En 1986 se establecieron las bases de la moderna fonética, a través de la formación de la Asociación Fonética Internacional, con el objetivo de mejorar la calidad de la enseñanza de las lenguas modernas. Estas bases proponían seis principios que constituían la versión opuesta al Método de gramática-traducción:

1.- El estudio de una lengua extranjera ha de comenzar por la lengua hablada en la vida cotidiana.
2.- El primer objetivo del profesor ha de ser familiarizar al alumno con los sonidos del idioma objeto de aprendizaje, para lo cual debe utilizar las transcripciones fonéticas en los primeros momentos.
3.- El segundo objetivo del profesor debe ser familiarizar a los alumnos con las frases más corrientes de la lengua extranjera a través de diálogos, descripciones y narraciones que han de ser fáciles y naturales.
4.- Al principio, la gramática se enseñara de forma inductiva. Se dejara para más adelante un estudio mas sistematizado de la misma.
5.- En la medida de lo posible han de evitarse la lengua materna y la traducción. Las explicaciones han de darse en segundas lenguas.
6.- En una etapa posterior, la introducción de la lengua escrita se hará siguiendo los siguientes pasos: primero reproducción de textos; segundo, reproducción de narraciones orales, y tercero, libre redacción. Solo se hará uso de la traducción escrita (inversa o directa) al final del curso.”Por primera vez se intento dar respuesta científica a los diferentes aspectos de naturaleza lingüística…psicológica… y metodológica… que intervienen en el aprendizaje de una lengua”[4].

   EL METODO AUDIOLINGUE

   Este método, que también se le conoce como aural-oral y mim-mem, data de la segunda guerra mundial. La expansión del imperialismo, necesidades políticas y estratégicas, así como los éxitos en la investigación aceleraron el desarrollo de esta metodología (heredera incuestionable del método directo).

   En él se le da prioridad a la lengua hablada (expresión oral y audición) considerándola como un sistema de sonidos, usados para la comunicación social. Se busca la corrección lingüística y se trata de que el individuo aprenda el nuevo vocabulario por asociación de la palabra hablada y la imagen visual, fundamentalmente mediante la repetición. Hace mucho énfasis en ejercicios mecánicos y de imitación de patrones nativos para lo cual se usan medios tecnológicos avanzados (audio gramófonos, grabadoras) y una guía de estudio bien detallada que modele todos las posibles situaciones donde el individuo deba usar la lengua para que le sirva de ejemplo; toda esto a fin de lograr un modelo lo más preciso posible.

   Es evidente la presencia de Skinner y el neo-conductismo, en tanto se trata al lenguaje como un conjunto de hábitos, una forma de conducta social y una forma de reacción ante el medio. No se le da importancia a la parte racional y consciente del aprendizaje. A pesar de estas deficiencias, aquí ya se habla de una teoría de aprendizaje coherente que triunfó en determinados contextos; particularmente con los militares. Skinner y sus seguidores entendían que aquellos que aprenden el lenguaje como una forma de expresión verbal no podían llegar a un entendimiento de los hablantes nativos. Para él, saber una lengua era algo más que saber sobre qué hablan y cómo hablan o conversan sus nativos.
La teoría conductista en la enseñanza de lenguas ha resultado en repeticiones mecánicas de ciertos patrones lingüísticos, y un uso excesivo y extensivo de la imitación hasta el nivel de obviar la creatividad y la espontaneidad. Para tal fin se han diseñado los laboratorios de lenguas y la enseñanza programada, a pesar de que los resultados no han sido satisfactorios. 

   La invasión del conductismo llegó hasta la lingüística. Algunos autores  pidieron prestada, al conductismo, la idea de que el lenguaje era un conjunto de hábitos y que el aprendizaje era esencialmente un proceso de condicionamiento. Así es fácil entender la necesidad de ejercicios mecánicos y de reforzamiento.
El aprendiz es llevado a través de una serie de situaciones de estímulo-respuesta que lo conducen poco a poco al objetivo deseado y minimizan la posibilidad del error. El aprendizaje ocurre al formar un lazo entre el estímulo y la respuesta a la que este se asocia. Cuando el aprendiz puede dar la respuesta deseada o correspondiente al estímulo, se asume que él ha aprendido esa conexión. Las conductas aprendidas consisten en una nueva cadena de respuestas condicionadas.

   Para los conductistas también fue muy significativa la noción de tiempo. Dos eventos que se repiten, se asocian si están cercanos en el tiempo. Es por eso que el aprendizaje de la lengua se apoya en figuras para lograr una identificación de la palabra, su representación visual y luego una asociación duradera.

   Las nuevas estructuras deben ser practicadas hasta la automatización antes de ser contrastadas con otras o ser usadas en diálogos o conversaciones libres. Los conductistas conciben el lenguaje como una conducta verbal condicionada, un proceso mecánico y no racional, por lo tanto la visión del proceso de aprendizaje consiste en brindarle al estudiante la práctica necesaria para aprender la respuesta apropiada en correspondencia con el estímulo.
Del estudiante se espera que use la mayor parte de su tiempo respondiendo activamente al estímulo seleccionado. La concepción del aprendizaje que manejan los conductistas, demás está decirlo, es mecanicista ya que a la mente no se le ha asignado un rol en este proceso de condicionamiento. De ellos es importante destacar (aunque no es lo único) la importancia de aprender haciendo y la idea de la individualización del aprendizaje que generalmente no se les reconoce.

    EL ENFOQUE COMUNICATIVO

   Los años 70s han dado a la luz una propuesta de método de enseñanza de lenguas más novedosa. En realidad no es un método sino un enfoque que entiende el aprendizaje de lenguas como un proceso donde lo más sustancial no son las formas lingüísticas, sino las intenciones comunicativas (el aspecto funcional) y su propiedad. El enfoque comunicativo ha sido desarrollado por lingüistas británicos como una reacción a los enfoques basados en la gramática.

   Este enfoque no escapa de las largas garras del conductismo, asimila sus aciertos al mismo tiempo que hereda alguno de sus desaciertos, y manifiesta en la práctica una alta dosis de cognitivismo y de humanismo. Vale la pena destacar que en este enfoque se sintetiza lo mejor del cognitivismo, este enfoque ha sido el único, en la enseñanza de lenguas, que se destacada por basarse estrictamente en las teorías cognitivas o los trabajos de Chomsky asociados a estas. Para la metodología comunicativa la lengua es más que un sistema de hábitos que pueden ser formados a través de ejercitación mecánica.

   Este es un sistema específico y el aprendiz debe saber cómo es que este sistema acciona en la comunicación real como medio para lograr un fin. Sus materiales, básicamente con una organización nocional, a menudo ilustran el lenguaje necesario para expresar y entender diferentes funciones, y enfatizan el uso del lenguaje apropiadamente en diferentes tipos de situaciones y para solucionar diferentes tipos de tareas. La propuesta comunicativa parece una creación más acabada y sofisticada que intenta integrar el "hacer" de los conductistas desde la óptica de un hacer con sentido y significado, el "pensar" propio de los cognitivistas y el "sentir", la afectividad, la empatía y el ambiente relajado de los humanistas.

   Para la psicología cognitiva, el aprendizaje es un proceso activo y propone que la enseñanza facilite el procesamiento mental activo por parte de los estudiantes. Los procesos cognitivos implican el reconocimiento de la forma, percepción del significado, relación de los universales y particulares, generalización y analogización.
La influencia de esta corriente psicológica opuesta al conductismo, generaliza el uso de ejercicios diseñados para garantizar una comprensión de los conceptos gramaticales introducidos, a través de una explicación deductiva anterior a cualquier práctica de la estructura. Las ideas del enfoque del código-cognitivo, que por cierto no devino en ningún método particular de enseñanza de lenguas, están en total armonía con las ideas básicas del cognitivismo.

   Algunas de las teorías de las psicologías cognitivas tienen una base neuropsicológica que consideran “el aprendizaje como un proceso mental[5]. Los cognitivistas proponen un aprendizaje significativo; para ellos la información adquirida memorísticamente (arbitraria y verbal) es de poco uso y rápidamente se olvida. El criterio más importante es si el nuevo conocimiento puede ser incorporado a la estructura cognitiva ya existente en el aprendiz. Para que así sea, el nuevo material debe ser relacionable a la estructura cognitiva previa del aprendiz de un modo no verbal y no arbitrario para que pueda ser transferible a nuevos contextos.

   Además de haber asimilado al cognitivismo, el enfoque comunicativo ha tomado del humanismo el énfasis en el trabajo de grupos, la búsqueda de la sensibilidad, las dinámicas grupales y el sentido de la necesidad del crecimiento personal. Así como el énfasis en la selección, la libertad para que el alumno se enfrente, sin el control directo del maestro, a los problemas que debe resolver.

   Esta propuesta, por su visión de enfoque, es menos cerrada; y recoge de sus antecesores algunos elementos, pero además le pide a la lingüística la teoría del contexto y los actos del habla, centrándose en el desarrollo de habilidades y la realización de funciones comunicativas. A pesar de los aciertos  no se da la solución universal a la enseñanza de lenguas pero si incorpora una nueva visión del aprendizaje, que se da en la actividad comunicativa y para ella.

    El intercambio de ideas y la producción y transmisión real de información no es igualable a la asimilación de un conjunto de respuestas condicionadas sin significado o sentido para el aprendiz. El lenguaje se ve como una creación individual, que a menudo se aprende a través del ensayo-error.
 
   LOS METODOS HUMANISTICOS

   Desde la década del ochenta los investigadores han descubierto algunos ingredientes críticos en el aprendizaje de idiomas. Han visto que el ambiente más adecuado es aquel donde el idioma es utilizado naturalmente para la comunicación. Aunque algunos aspectos requieren aprendizaje consciente, la adquisición de la base de un idioma se logra óptimamente en un contexto en el que el aprendiz se concentra en expresar y entender ideas en el nuevo idioma.

    El desarrollo de la lengua nativa y extranjera tiene lugar dentro y fuera del aula, considerándola un ámbito formal, donde las lecciones se concentran en habilidades lingüísticas específicas y crecimiento cognitivo. El trabajo en el aula facilita, consolida, pule y construye sobre el desarrollo ya logrado en ámbitos informales (aprendizaje social de una lengua). Es importante entender que el desarrollo de la lengua extranjera tiene lugar en el aula, porque si así no fuera las clases se limitarían a aprender acerca del idioma, y no a aprender el idioma en sí.

   Algunos argumentan que esto podría lograrse satisfactoriamente si el aula reflejara las condiciones que hacen posible el desarrollo del idioma en el mundo exterior. El idioma adquirido tiene que ser retenido por un período de tiempo y extendido a través de su aplicación en una variedad de tareas relevantes y motivadoras.

   La motivación

   Los enfoques humanísticos del aprendizaje de idiomas enfatizan la importancia de la motivación. Se cree que cuanto más personalmente involucrado esté el alumno en cualquier tipo de actividad, es más probable que sostenga el esfuerzo hasta el final, y que se beneficie de su resultado.

   Un alumno motivado participará activamente y su atención, (pre-requisito del aprendizaje) se extenderá sobre períodos más largos de tiempo permitiendo que lo asimilado sea retenido.

   Con gran orgullo podemos decir que en nuestros veinte años de trayectoria hemos puesto en práctica estas consideraciones. Y tanto la currícula como las actividades ofrecen un abanico de propuestas, en las que se incluyen teatralizaciones, competencias entre integrantes de un mismo grupo y de otros niveles, salidas a jornadas recreativas, campamentos de inmersión lingüística, donde los alumnos puedan vivenciar en forma concreta el aprendizaje de ese idioma.

     Metodos y técnicas producto del método humanístico

   Bajo el enfoque humanista se desarrollaron una serie de métodos y técnicas que se muestran a continuación:
El método silencioso,  creado por Caleb Gattegno, en base a un enfoque humanístico, que incentiva el aprendizaje por descubrimiento. Gattegno proponía en este método la obtención de independencia, autonomía y responsabilidad por parte del alumno, además de la cohesión del grupo en la solución de problemas. El profesor estimulaba al alumno, pero debería permanecer en silencio la mayor parte del tiempo. Este método es marcadamente estructural, pero presenta innovaciones en la forma de presentar los materiales.

   El papel del profesor, como facilitador en el aprendizaje, consistía en  estimular con pocas palabras y una mínima corrección, la utilización de materiales originales tales como tablas con piedras o hastes de dimensiones y colores variados para introducir vocabulario (colores, números, adjetivos, verbo y sintaxis).

    El aprendizaje comunitario es un método creado por Curran (1976), con fuerte andamiaje en el enfoque humanístico de Karl Rogers. Curran traslada de la psicología a la metodología de la enseñanza de lenguas procedimientos y técnicas del modelo clínico de terapia rogeriana. Las necesidades afectivas y cognitivas de los alumnos están en primer plano. El proceso interactivo es de gran importancia, teniendo en mira una teoría de lenguaje que considera la lengua como un proceso social. En ese proceso interactivo el alumno, metafóricamente convertido en cliente, recibe instrucciones del profesor-terapeuta a través de la traducción de aquello que desea comunicar al grupo. Las necesidades de comunicación determinan la progresión del curso.

   Desde 1960 James Asher experimentaba el método de la respuesta física tota, y  en la década de 70 este método repercute en la enseñanza de L.E.

    El método se apoya en la teoría psicológica de que la memoria aumenta si se estimula a través de la asociación de actividades motoras durante el aprendizaje de lenguas, lo que baja la ansiedad. El profesor conduce a través de mandos la acción de los alumnos.

    En 1979, el psicólogo búlgaro Georgi Lozanovi desarrolla la sugestopedia, método que se basa en la teoría de que el cerebro humano podría procesar grandes cantidades de material sí le fueran dadas ciertas condiciones de aprendizaje, una de las cuales sería el estado de relajamiento producido bajo el control del profesor. El método señala que el estado de relajamiento de la mente es fundamenta para una máxima retención del conocimiento ofrecido. La música es el principal recurso utilizado, además de la ambientación de la sala de clases, que debería ser cómodo. Las aplicaciones de la sugestopedia dicen respecto a la presentación de vocabulario, lecturas, diálogos, roles y dramatización.

    Stephen Krashen, profesor de lingüística aplicada en la Universidad del Sur de California, elabora un modelo teórico de adquisición de una segunda lengua, basándose en el modelo del monitor, el enfoque natural. Es uno de los métodos que más repercusión tuvo en los años 80 en Europa y en los Estados Unidos

   El enfoque natural emplea, en los niveles iniciales de aprendizaje de la lengua, técnicas de respuesta física total, determina como tarea del profesor suministrar un input comprensible a los estudiantes y crear una variedad de estímulos e intereses dentro de las actividades en sala de clase. En este método se delimitan tres estadios por los cuales pasan los alumnos.

 1. Estadio de la Pre-producción (período de silencio): desarrollo de la habilidad de comprensión auditiva
2. Estadio de la Producción Precoz: marcado por los errores. Énfasis en el significado y no en la forma. No se debe corregir en este nivel, sólo si es grave el error cometido
3. Producción discursiva: se utilizan actuaciones con roles, inicio y finalización de diálogos, discusiones y formación de pequeños grupos de trabajo.

    Método audiovisual

   El método audiovisual es un modelo didáctico concebido para la enseñanza de la LE a principiantes. Da prioridad al lenguaje oral, sin por ello desatender el lenguaje escrito; las primeras sesiones (aproximadamente 20 horas) del método se dedican al lenguaje oral y a continuación se comienza el aprendizaje del lenguaje escrito. Se considera que el aprendizaje de la LE se canaliza a través del oído (escuchando diálogos) y de la vista (observando la situación); ello explica el empleo combinado de grabaciones de diálogos en soporte magnético (en la época inicial, en magnetófono; posteriormente, en casete) e imágenes en filminas (parecidas a las diapositivas). Los recursos materiales reciben una atención especial, procurando que la presentación resulte lo más atractiva posible.

   Haciéndose eco de las teorías conductistas, este método propone la repetición y la práctica mecánica de estructuras, con el fin de automatizarlas: “las reglas gramaticales se aprenden de manera intuitiva”[6]. Ahora bien, dada la naturaleza social del lenguaje, es imprescindible presentar las estructuras debidamente contextualizadas en los diálogos grabados y en el contexto social que se aprecia en las imágenes; todo ello constituye un paso decisivo hacia un uso comunicativo del lenguaje. Se estima que no se debe emplear la L1 en clase, entre otras razones, por considerar que la contextualización mediante imágenes ya garantiza la comprensión.


[1] Ibid.p.24
[2] HENANDEZ, REINASO, F.L.: Los métodos de enseñanza de lenguas y las teorías de aprendizaje [Cuba.2008] p.143.
[3] Ibid.p.144
[4] Martin,Martin,J.M.: LA LENGUA MATERNA EN EL APRENDIZAJE DE UNA SEGUNDA LENGUA[España:Sevilla.2000]p.28-29.
[5] PICADO, GODINES,F.M.: DIDACTICA GENERAL: una perspectiva integradora[San José C.R.:EUNED.2006]P.83.
[6] PIKABEA,TORRANO,I.: GLOSARIO DEL LENGUAJE[España,netbiblo,2008]p.150.
© 2025